Los grandes partidos se han convertido en agencias de colocación de afines.
La idea del voto útil sugiere votar contra conciencia en favor de otro partido mayoritario, que se considera más ganador. Algunos lo piden abiertamente, como el presidente del PP. Otros, como el PSOE sugieren grandes males si se votará a otros partidos, para que en segundo pensamiento les voten a ellos. Si mentir en beneficio propio es suficiente para no fiarse del mentiroso, invitar a que el votante mienta al votar, es una humillación. En todos los casos convergen hacia el bipartidismo, que puede ser alternante como en España, o de coalición de los grandes partidos para gobernar juntos, las llamadas coaliciones grandes. En Alemania ha dado lugar a grandes coaliciones, gobernando los dos grandes partidos y poniéndose de acuerdo en un programa común, cuando no tienen mayoría suficiente. En España la llamada al voto útil de los dos grandes partidos PP y PSOE, ha sido siempre calamitoso, porque nunca se han puesto de acuerdo, y han optado por gobernar uno de los grandes partidos con los partidos nacionalistas catalanes y vascos. En todos los casos han alimentado el monstruo separatista, al ceder las competencias de educación, facilitando el adoctrinamiento anti-español, germen del separatismo. Los vascos y catalanes han conseguido todas las competencias y ambos con el adoctrinamiento han generado una situación que parece irreversible. Esto ocurrió hasta que llegó Zapatero en 2004, empeorando la situación del bipartidismo, porque los jóvenes adoctrinados nacionalistas se convirtieron en adultos separatistas. Ambos partidos mayoritarios, PSOE y PP, nunca cooperaron (mas que para repartirse el Estado en alternancia) con socios más anti-españoles. Rajoy invitó a los liberales a salir de su partido, ni arregló los destrozos de Zapatero, con mayoría absoluta, ni bajó impuestos, ni tuvo la dignidad de dimitir, entregándole a Sánchez un gobierno, que nos ha conducido a una dictadura, la quiebra de la unidad nacional, sin defensa, sin separación de poderes, sin respeto de la libertad y la propiedad privada, y con una deuda que arruinará a varias generaciones. A nivel autonómico, ha ocurrido algo parecido, y donde el separatismo era simbólico como en las comunidades balear, navarra y valenciana, el PSOE se alió con separatistas y comunistas, en lugar de hacerlo con el PP, y gracias al adoctrinamiento tenemos zonas separatistas camufladas. En la administración local, se replica el modelo porque nuestra oligarquía de partidos hace que el caudillo del partido mayoritario es el gran cacique que replica su autoritarismo. Cuanto más se practica la idea del voto útil y el bipartidismo alternante, peor para los ciudadanos porque la coalición de PP o PSOE con los partidos “pequeños” en lugar de acordar un programa común, pagan precios inconfesables para gobernar. En todos los casos el bipartidismo alternante aumenta la deuda pública, porque llenan cuanto pueden la administración de gente de su partido, y hoy por ti, y mañana por mi, cuando llegan los nuevos no eliminan personal innecesario contratado por el anterior partido mayoritario. Así, todas las instituciones públicas, a todos los niveles de la administración, han construido un Estado elefantiásico que nos ha arruinado, con una deuda que se ha multiplicado por cuatro, desde que llegó Zapatero, y cuestiona no solo la unidad nacional, su defensa, sino la existencia como país. La deriva del voto útil se ha deteriorado paulatinamente habiendo sido incapaces los dos grandes partidos de pactar ni una sola vez a nivel, ni para gobernar, ni para acordar una ley de educación, ni para grandes temas de Estado, al que han arruinado económica, material y moralmente. Cada ciudadano debería votar en conciencia y lo más racionalmente posible, huyendo de cálculos electoralistas de caudillos que han convertido España en un estado fallido. Y como todo lo que puede empeorar suele hacerlo, sobre todo con este PSOE de Sánchez, que ha construido un nuevo frente popular antipatriótico separatista/comunista, que esperemos no conduzca a otro enfrentamiento civil como ya provocaron en 1936. La campaña electoral del PSOE para elecciones del 28/05/2023 es un ejercicio de malversación pública del Gobierno, financiando no solo con medios públicos los actos y desplazamientos, sino con presupuestos públicos, intentando comprar voluntades electorales de jóvenes y mayores con regalos. Si los resultados en las elecciones autonómicas y municipales del 28 de Mayo son como dicen los sondeos, habrá que estar atentos a los pasos de este PSOE sin límites morales. España está en peligro, y cuando para gobernar todo vale, mintiendo por sistema, y no basten socios internos, pueden usarse externos, o promover conflictos. El PSOE fue el único partido que se opuso en Bruselas a sancionar a Marruecos por sobornos y ataques a la libertad de expresión. Coalición por Melilla (partido pro-marroquí) está siendo investigado por compra de votos. La cesión de Sánchez a Marruecos no se ha explicado. Las traiciones tardan en identificarse, pero existen.