El precio de la libertad en España

La responsabilidad del votante esclavo

Cuando se habla del precio de algún bien o servicio, es porque hay mercado. Hay mercados de bienes ilícitos como las drogas, o la prostitución. ¿Es la libertad un bien comercializable? La esclavitud oficialmente ha terminado en Occidente, pero todo lo que antes existía de un modo transparente, ahora está envuelto y parecen otra cosa. Los esclavos actuales tienen menos libertad que en tiempos de los romanos, lo que ocurre es que no se enteran, son esclavos mentales. No notan los grilletes porque no se mueven. 

¿Saben quienes son? Los que votan fielmente a un color político, hagan lo que hagan sus representantes. Los hay en todo el espectro político, son personas que tienen una concepción inmutable, irracional, no depende de la gestión que hagan los representantes. Es su derecho, otra cosa es que sea inteligente o estúpido, si beneficia a los demás, o a nadie. Sólo cambian de opinión los que piensan. San Juan de la Cruz dijo que no puedes llegar a un lugar distinto si sigues siempre el mismo camino.

Los españoles dependemos de personajes como Puigdemont, Otegui, o Sánchez. La Fiscalía del Estado, el Ejército, obedecen al Gobierno, no a la Constitución. Las fuerzas de seguridad del Estado no pueden hacer cumplir la ley, ni defenderse, y son asesinados por delincuentes comunes por falta de medios. El socialismo desprecia el comercio, saquea a los autónomos, su ideal es que todo sea público. Ahora se proponen acabar con el sector primario, después de haber destruido la industria y oficios manufactureros, la educación y la autoestima nacional. Nos dicen que no tendremos nada y seremos felices, que comamos insectos y carne sintética. 

Todo bien o servicio comercializable tiene precio. Gratis no hay nada. Su precio es el tiempo de vida que otra persona ha dedicado a producirlo o posibilitarlo, aparte del coste de algún posible material necesario. Un estado moderno debe atender a personas desvalidas, pero no debe producir millones de desvalidos artificiales, subsidiados permanentes, por desgobierno. El PIB nacional lleva dos décadas sin crecer, descontada la inflación. ¿Por qué? Se trabaja menos en el sector privado y más en el público. 

 Acostumbrar a las personas al subsidio estatal arruina al país, hay que endeudarse y cuanto más grande es la deuda, su financiación se come cada vez más parte del presupuesto. Si ponen más impuestos, lo que hacen los gobiernos socialistas, aumenta el paro privado y se destruyen empresas, pymes o autónomos, principalmente. Se necesitan más subvenciones, subsidios y deuda. Es un circulo vicioso que conduce a la bancarrota.  

Los gobernantes socialistas usan el dinero de nuestros impuestos, optimizando su agenda electoral, derrochan gasto para comprar votantes, subvenciones y privilegios, gratuidades de transporte, bonos culturales, etc.  La deuda no les importa nada hasta que Bruselas obligue, pero la UE se ha convertido en una burocracia comunista ecologista, quiere acabar con el sector primario europeo a cambio de favorecer a países terceros, que como se ha demostrado sobornan a políticos de la UE.

Una de las consecuencias perversas de los “esclavos mentales” que votan a un partido hagan lo que hagan, es que los gobernantes no necesitan ser responsables de lo que gastan. Cuando pierdan el gobierno por falta de dinero para comprar votos, un gobierno alternativo que le suceda durará poco en el poder porque no podrá enderezar la economía y hará recortes obligatoriamente, que le restará votos. En dos décadas los gobiernos Zapatero, Rajoy y Sánchez, nos han conducido a una deuda multiplicada por cuatro. El Gobierno actual, nos ha endeudado entre Enero 2023 y Enero 2024, en 280 280 millones diarios. 

¿Cómo? Aumentando gasto público, en ministerios, asesores, empleos públicos superfluos, subvenciones. Todo esto mientras la recaudación fiscal ha aumentado como nunca por la inflación y las tarifas del IRPF no se han deflactado para disminuir el efecto inflación. La situación empeorará con la reducción comunista de la jornada laboral a 37,5 horas semanales, que supondrá un contrato público más por cada 15 antiguos. En Enero, descendió en 17.000 la cantidad de autónomos por el aumento de cotizaciones sociales.

El socialismo teme a las personas libres para quienes el estado es un mal menor,  aceptan el estado por necesidad, resta libertad, nos impone impuestos, nos puede enviar a una guerra, o prisión. La ideología comunista sueña con que todo sea público, el individuo que prefiere la iniciativa privada es alguien a desconfiar porque busca beneficio, el comercio es un robo, el comerciante un explotador, un desobediente. 

Muchos ignoran que esta mentalidad se transmite en los contenidos educativos, la ausencia de toda idea liberal en la educación pública actual, el absoluto desconocimiento de Adam Smith, la escuela austriaca, en las facultades públicas, y no digamos del resto de facultades, induce un pensamiento socialista que luego se confirma con la cultura hegemónica del llamado “progresismo” en los medios de comunicación. 

El cine español, plagado de subvenciones ministeriales, está basado en la propagación del socialismo subyacente. La persistente temática de la guerra civil, el franquismo, la represión, está plagado de ideología izquierdista.  En las facultades de todas las universidades públicas españolas se respira la cultura socialista del amor a lo público. Lo público es bueno, lo privado sospechoso. Por eso, 3 de cada 4 titulados quiere ser funcionario, cualquier emprendedor es excepción, rara vez procede de aulas públicas.

La libertad es la condición que permite que cada cual  pueda ser responsable, cumpliendo la ley. No hay libertad sin cumplimiento de la ley, ni hay libertad sin la verdad. Tenemos un gobierno que miente sistemáticamente hasta cambiando los nombres de los conceptos reconocidos para que sea difícil acceder a ella.

No puede haber libertad sin justicia independiente del poder ejecutivo, si se hacen leyes para amnistiar a quien apoye al gobierno, no hay igualdad ante la ley, y no hay libertad. ¿Puede haber libertad sin respetar la propiedad privada, ilegalmente ocupada ? ¿Puede haber libertad si la guardia civil está vetada en zonas separatistas, y sin medios para defenderse de narcotraficantes, como acaba de pasar en Bárbate?  

En el llamado país vasco no hay libertad para votar, ni para decir que eres español, intente visualizar una bandera española y verá lo que le pasa. A base de amenazas y extorsiones, obligaron a exiliarse a 200.000 familias, que no les votaban. Así, es fácil ganar elecciones. Ni allí ni en Cataluña entran la guardia civil y la policía nacional, que  están mucho peor pagada que la Ertzaintza vasca, los Mossos catalanes . El resto de funcionarios del Estado también estamos peor pagados que los equivalentes vascos y catalanes. La igualdad socialista es una ficción para tontos.

Hay que ser muy rico, o muy recto moralmente, para decir no a algunas propuestas. El dinero y la ética juegan en campos distintos, como lo hacen la libertad y el poder, o el placer y el deber. No todo tiene precio, depende de los resortes morales, o económicos que se atesoren, para resistirse. 

Los buenos gobiernos deben gobernar para todos, no como hacen los gobiernos socialistas, comunistas y separatistas en España, que se dedican a comprar con el presupuesto y deuda, los votos de sus fieles y decidir contra los que no les votan, que son autónomos, empresarios y constitucionalistas. Es un comportamiento tiránico que merecería que los millones de victimizados se pusieran en huelga fiscal. Debería ser inconstitucional, pero en España la justicia está contaminada por el poder ejecutivo.   

Los presupuestos socialistas incluyen gastos en subvenciones improductivas y clientelares, en 2023, más de 120.000 millones, casi lo que se gastó en pensiones, la mayor partida del presupuesto, el 10% del PIB aproximadamente. En España se reconoce una economía sumergida del 23% del PIB, y no procede solo de la no declaración del pequeño comercio sin IVA. Mucha corrupción procede de subvenciones gestionadas por fundaciones que no rinden cuentas, no son administración pública. 

El exceso de impuestos provoca fraude, porque para sobrevivir al saqueo fiscal, al evasor le resulta rentable la relación riesgo/beneficio, o vives “en negro” o mueres profesionalmente . Uno de los gastos más vergonzosos son las subvenciones públicas más o menos enmascaradas en contratos de publicidad institucional, a medios de comunicación privados. Es difícil decir la verdad cuando la subvención depende de lo que dices. Si criticas al pagador, no tendrás contratos de propaganda institucional.

Gobiernos dispensan subvenciones a medios de comunicación privados buscando trato favorable del medio subvencionado. No bastándole todos los medios públicos, Sánchez aprobó el gasto de 440 millones en publicidad institucional para subvencionar a medios de comunicación privados cuando convocó las últimas elecciones. ¿Entienden ya por qué aumenta tanto la deuda con Sánchez?.  El gobierno de la Comunidad de Madrid debería cuidarse de subvencionar al País (600.000 €), a Libertad Digital (450.000 €), o si lo hace, que reparta entre todos los relevantes, sin exclusiones, como El Toro TV.  

Deja un comentario