La única manera que tiene el PP para ganar elecciones generales 

 Los que no actúan debiendo hacerlo, serán los principales responsables.

Los grandes partidos políticos buscan ganar elecciones, o investiduras, generales, autonómicas o locales, sobre todas las cosas, porque el ADN de los partidos políticos es colocar a la mayor parte de sus afiliados. Son sindicatos del poder, con el agravante español, de que la mayoría de sus miembros no tienen vida alternativa al nivel del cargo político. En otros países, norteamericanos principalmente, empresarios de éxito, que no necesitan robar ni vivir de la política, intentan servir a su país dedicándose a la política, aunque sea por vanidad. En la España reciente, entran para vivir y enriquecerse con la política. Los partidos separatistas quieren separase para robar mejor, en un territorio más pequeño con votantes adoctrinados. El blanqueo por el Gobierno de la malversación aumentará la corrupción. 

Lo que nos interesa a los ciudadanos, es muy diferente, y es que, en la circunscripción electoral de la que se trate, haya prosperidad suficiente para llevar una buena vida, lo que implica primero poder ganársela, con un trabajo digno, lo más satisfactorio posible para cada uno de nosotros. Por eso, perder la racionalidad y ponerse la camiseta de forofo de unas siglas es una estupidez.  Los países que prosperan de verdad son aquellos en los que el interés de los partidos converge lo más posible con el de los ciudadanos.

¿Por qué mucha gente pierde la racionalidad al votar?  La educación sesgada anti-liberal y la hegemonía cultural esculpida a base de subvención influyen mucho.  Para ir contra-corriente socialista/separatista hay que estar muy seguro de uno mismo y estar leído. El motivo emocional varía mucho de unos a otros. El que escucha en casa o en el aula, o en lo que lee en las páginas o en las pantalla que le nutre de información o ideología de un sesgo ideológico nada más, pues está predestinado a esa ideología partidista. 

La ignorancia de la juventud contaminada de adoctrinamiento, utopías o idealismos, es razonable que traguen las falacias marxistas porque convencen y te creas que el capitalismo es perjudicial, porque en el educación española pública, desde 1975, nadie se atreve a decir lo contrario. En las zonas separatistas los jóvenes llegan a la mayoría de edad adoctrinada, y puede votar a quien le da una paguita, un bono cultural, o el transporte gratis. 

Un brillante análisis electoral del profesor Jesús Fernández Valverde, presentado en la fundación Rafael del Pino el 17 de  Octubre 2023, “Complejidad electoral y política de bloques en la España actual”,  subido a éste blog, demuestra que si el PP y VOX fuesen unidos a las elecciones generales ganarían la investidura.  La clave es que la ley electoral y la circunscripción electoral provincial sobre pondera en escaños a las provincias pequeñas, infra-pondera a comunidad de Madrid y grandes ciudades, es prácticamente indiferente para las provincias medias de Cataluña y Vascongadas.  La coalición PP-VOX se llevaría la mayoría suficiente en las provincias pequeñas, compensando todas las alianzas inconstitucionales del PSOE con separatistas, comunistas y partidillos localistas, que prácticamente desaparecerían con la coalición PP-VOX. 

Es falso que la mayoría sociológica española sea de izquierdas; es más, la inminente investidura de Sánchez va a ser la primera vez en que siendo la mayoría sociológica de derechas, va a ser investido el candidato de izquierdas. Recuerden que PNV y Junts per Cat. no son de izquierdas, sino separatistas de derechas. Este PSOE no defiende ni la Constitución, ni la igualdad de los españoles, lo que hace es conseguir el poder a cambio de lo que quieren los separatistas, que es romper España.  ¿por qué creen que están prohibidos los separatistas en las dos potencias europeas Alemania y Francia?  No hay país en el mundo donde se permita financiar con impuestos la auto-destrucción, y suele ser delito de alta traición.  

Se trata de una traición, un golpe de estado desde el Gobierno provisional, consentida por la aritmética electoral, la dejación de funciones de quien debe evitarla, por derecho el Tribunal Constitucional presidido por un obediente al Gobierno, y las Fuerzas Armadas que nadie sabe para qué están, ni defienden la Constitución, ni son convocadas por el Rey; tampoco se usan para evitar invasión de inmigrantes irregulares, más bien parecen militares armados de móviles. Con traidores sin escrúpulos la prudencia es certificado de consumación de la tragedia. Después sólo un conflicto civil puede revertir la situación, antes habrá el doble del hambre que hay ahora, y los sueldos y pensiones se rebajarán nadie sabe cuanto, dependerá de las condiciones que pongan quien nos rescate. Los primeros los funcionarios y pensionistas catalanes y vascos, cuyas economías son dependientes.

Una contienda electoral es una lucha por los votos. Recuerden que los persas (actual Irán) fueron un imperio en el siglo VI a.c. durante el reinado de Ciro el Grande. Los imperios no suceden por casualidad, y albergan virtudes. Pues bien, hay un proverbio persa, que nos da la receta y la dosis para remediar la traición nacional ideada por Zapatero en 2004, al  convertirse en un partido inconstitucional, aliándose con comunistas y separatistas, para lograr el poder rompiendo España. 

El PP no ha sabido responder hasta ahora, al cambio táctico del PSOE, sus asesores le dicen a sus líderes nacionales que tienen que conquistar el “centro” que es algo que no existe, no está quieto, es sencillamente una cantidad de personas que no tiene certezas, y cambia de camiseta, por influencias generalmente externas. Los antiguos votantes del PSOE nunca votarán al PP. Si no se dan cuenta que este PSOE no se parece en nada al de González, es que son estúpidos y  no cambian de voto. Si se dan cuenta, es que son ideológicos y tampoco votarán al PP.  

Sánchez es un psicópata metido en política, un matón que la partidocracia española no sabe filtrar, que cuando deje el poder enterrará hasta al mismo PSOE, y los españoles tardaremos muchas décadas en reparar los daños por su gestión, si no tenemos otra guerra civil, que todos deberíamos evitar.

Lo mantienen votantes imprudentes que arruinan sin enterarse, a sí mismos y hasta a sus propios hijos. Se equivocan al suponer que su pensión o sueldo público que perciben va a ser comparable al actual, después de la amnistía. Las empresas van a huir de España, como ya han hecho Ferrovial y Repsol, porque en una dictadura no hay seguridad jurídica, como lo prueban los impuestos arbitrarios a los beneficios, que además se repercuten en los precios a los clientes. El paro y la deuda crecerán mucho. Los gobiernos Sánchez no hacen más que derrochar gasto y pagar chantajes a los separatistas aumentando la desigualdad territorial. Los recortes serán inevitables, y cuando el hambre llegue habrá rebelión civil de las zonas más pobres.

Cada voto a este PSOE ha sido un martillo automático rompiendo España. Si quién tiene obligación de hacer cumplir la Constitución cumpliese la suya, este individuo estaría en un lugar muy oscuro, muchos años. Por no hacerlo puede haber disturbios civiles graves, y los responsables serán todos los que han contribuido, apoyado, o permitido sus actos.

En 1808 los españoles se levantaron contra un enemigo invasor, traicionados por su Rey. Ahora la traición viene desde el Gobierno, pero el pueblo se puede levantar otra vez, por no hacerlo el Rey, como lo hizo su padre, en 1981. Ahora no hacen falta tiros para dar un golpe, pero el efecto es el mismo. Los buenos discursos de Felipe VI no bastan cuando los traidores no escuchan, hay que advertirles de que lo pagarán si lo hacen, y que las Fuerzas Armadas actuarán, y no dependen de Margarita Robles, sino del Rey. 

Feijóo se ha equivocado intentando ganar la mayoría absoluta solo, intentando llevarse todos los votos no separatistas y quitándole a VOX los que pudiese, ignorándole hasta que pasaran las elecciones, de alguna manera quería acabar con VOX. Eso no lo puede hacer Feijóo porque el votante de VOX sabe que él es regionalista, partidario del plurilingüismo, amigo de los sindicatos y antiliberal como Rajoy.

¿Cuál es la vía entonces? Un proverbio persa da la solución: “Primero llévate bien con tus amigos y luego ataca a tus enemigos”. Obsérvese, que es lo primero, pactar con los amigos. No hay conmutatividad, ahora no basta pactar después de las elecciones sino antes. En Castilla-León, Extremadura, o en Valencia bastó pactar después. En las generales hay que pactar antes e ir aliados a las elecciones. Si no lo hace, no ganarán investidura.

Feijóo ha intentado ganar al frente socialista/separatista sin llevarse bien con sus amigos VOX, ha atacado al socialismo/separatismo sin aliarse primero con VOX, incluso convirtiéndolo también en enemigo. Feijóo ha dicho en tu toma de posesión como presidente del PP: nosotros no somos antieuropeos, ni anti-autonomistas, no necesitamos consejos de europeísmo, ni de constitucionalismo. En fin, victimizando a VOX, y haciéndole el juego a la colación separatista/socialista, cuando le acusan constantemente de “aliarse con la extrema derecha”. Ellos si saben que si se alía antes con VOX están perdidos.

¿Puede cambiar de mensaje Feijóo?  Si, pero la credibilidad la ha perdido. Muchos votantes de VOX  nunca votarán a Feijóo aunque se aliara con VOX. La persona adecuada es Isabel Diaz Ayuso. No se si ella quiere, tampoco si en el PP lo consentirían, pero si es lo que España necesita, una colación electoral PP/VOX liderada por Ayuso, antes de las elecciones. 

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