Gobernados por anti patriotas.
Ahorrar y eliminar lo que sobra son principios de gestión eficiente. Ahorrar es retrasar un gasto que puedes hacer y no haces voluntariamente. Sin ahorro no hay inversión salvo el endeudamiento que acaba en colapso. Según la encuesta oficial de condiciones de vida en España 2023, dice que los ingresos medios españoles no alcanzan 21.000 euros anuales, y que los de los empleados públicos superan un 30% a los privados. Imagine quién puede ahorrar en España, y quien no tiene dificultades para llegar a fin de mes. La situación empeora en 2024 porque el aumento real (no oficial) del coste de la vida es superior al aumento de sueldos y pensiones y la tarifas del IRPF no han sido deflactadas. Entre el IVA, IRPF, IBI, impuestos especiales, patrimonio, los españoles que pagamos impuestos, trabajamos más de medio año para pagar impuestos a las sectas extractoras gobernantes.
La natalidad de las madres españolas es la más baja desde que hay registros, los abortos sobrepasan los cien mil anuales, las mascotas sustituyen a los niños. La clase media desaparece y la vivienda compartida prolifera. Anualmente 400.000 de nuestros mejores titulados (valientes con idiomas) emigran por falta de actividad económica privada, pero recibimos 60.000 inmigrantes irregulares que pasan por falsos menores sin identificación, que pagamos con nuestros impuestos, sin plan de formación, repartidos por el país a escondidas y que aumentan la seguridad ciudadana, especialmente de ancianos y niñas, victimas con impunidad consentida. Cada falso menor cuesta más de 5.000 € mensuales, y en un año pasan a mayores de edad regularizados. Entonces ya pueden votar en las municipales a quien les ha abierto las puertas, los ha subvencionado y legalizadoº.
Una familia, empresa, comunidad de vecinos, universidad pública, comunidad autónoma, Estado, que derrocha gasto por no eliminar lo que sobra, no puede ahorrar, ni invertir, y cuando surge un imprevisto: enfermedad familiar; problemas de humedad en fachada; disminución de financiación del gobierno autonómico; pandemias, no puede financiar el imprevisto. Los responsables de la gestión deben estar preparados para afrontar riesgos previsibles. Desgraciadamente, la priorización de las apariencias, el populismo, el alejamiento de la realidad por equivocar la verdad con lo que piensa la mayoría, la falta de ética, la falta de voluntad de servicio, nos pone en manos de incompetentes con demasiada frecuencia.
No hace falta recurrir a la escuela austriaca de economía para demostrar que el socialismo es económicamente inviable. Observe con atención la gestión de cualquier gestor público socialista, que se rige por el principio tiránico de palo para quien no me vota y zanahoria para quien puede votarme. ¿Qué significa esto? Gobiernos tiránicos, que no respetan la igualdad de los españoles, beneficiando a unos y castigando a otros. Gasto para repartir zanahorias: contentar votantes con privilegios a los empleados públicos, subvenciones clientelares para vivir de la ideología feminista y ONG para traer inmigrantes. Palo para los que no le votan: saqueo fiscal para autónomos y empresarios.
Todo esto además impregnado del cálculo político, como en el caso de la riada de nuestra comunidad, donde gobierna un partido de color político diferente al estatal, dejando que se desgaste, aunque haya muertos y ruinas incontables, todo para conseguir el poder político gratis en la comunidad cuanto antes. Los partidos políticos mayoritarios, mucho más el PSOE que el PP, aunque comparten las corrientes europeas, se comportan como sectas ideológicas de colocación de afines. No priorizan servir al bien común para todos, sino marginar a unos (los que no les votan) y beneficiar a otros (los que los pueden votar), sin importarles dividir a la población. Desde que llegó Zapatero al PSOE, la ética se ha sustituido por el maquiavelismo orwelliano , sustituyendo los medios legales por los que hagan falta para conseguir el poder. Así se explica pactos con partidos separatistas (prohibidos en Francia y Alemania) y a terroristas blanqueados que gobiernan instituciones porque han expulsado con amenazas a los que no les votaban.
Dos grandes males nos impiden mejorar en España: la partidocracia y los votantes forofos. La primera es casi imposible porque tendrían que ponerse de acuerdo PP y PSOE principales beneficiados. ¿Por qué? Porque aunque sea un criminal, enfermo, o canalla, el caudillo de uno de esos partidos será el presidente del Gobierno . No hay filtros que lo puedan evitar. Los votantes forofos, esos individuos que votan siempre lo mismo, le pongan a quien le pongan de candidato, permiten que teniendo un suelo electoral alto, permiten tocar suficiente poder sin necesitar ocuparse de los intereses reales de los ciudadanos, la agenda del sentido común: empleo digno, vivienda asequible, inmigración controlada, impuestos razonables, poder adquisitivo suficiente, sanidad desmasificada, educación espiritual sin adoctrinamiento, seguridad ciudadana.
En lugar de la agenda del sentido común, tenemos agendas climáticas y ecológicas “sandía” anti-patrióticas, promoción de sexualidades artificiales; eliminación de la natalidad, de la agricultura y ganadería tradicional; identificación del patriotismo con ideologías extremas; identificación del racismo con la inmigración controlada; vivir felizmente sin propiedades; comer carne y leche sintética, insectos; eliminación de la espiritualidad, trascendencia y tradiciones occidentales; la sustitución de la moral privada por otra oficial; la sustitución de la población europea por otra pluricultural sin identidad; la eliminación de la clase media; la limitación de la libertad de expresión; la eliminación del dinero físico; etc.
En La UE los partidos patrióticos, que la propaganda califica de extrema derecha, pregonan el sentido común, los intereses de los ciudadanos, aumentan sin freno en la UE, frente a unas élites burocráticas y ecologistas “sandía” al servicio de intereses anti-europeos, que han destruido la industria, la innovación, la agricultura, ganadería, y el sector automovilístico, que nos engañan con apocalipsis climáticas y ecologismos malthusianos , que reducen la competitividad europea, aumentan los impuestos sin freno, el paro.
Mientras tanto las élites viven con sueldos, privilegios y pensiones muy por encima de la cada vez más empobrecida población europea. Todavía los partidos patrióticos no alcanzan el poder porque todos los partidos perdedores en elecciones se unen contra ellos. Pero no debe tardar el momento en que empiecen a alcanzar los gobiernos y reseteen todo el daño causado por unas élites que no representan a los ciudadanos ni al sentido común.
Cada vez que gobiernan socialistas nos endeudan porque no saben gobernar sin derrochar. El sector privado decrece por asfixia fiscal, el sector público no para de crecer por decisión política. Por ejemplo, los Gobiernos Sánchez nos han endeudado 230 millones de euros diarios desde que gobierna. Destruido el tejido industrial y manufacturero desde hace años, ahora los ecologistas europeos destruyen el sector primario, convirtiendo España en una economía de servicios. Los jóvenes españoles están desaprovechados, no tienen experiencia laboral porque no hay empleos privados. Están condenados a la emigración porque importamos casi todo y exportamos cada vez menos. El sector privado decrece y el público aumenta. No hay suficiente actividad privada, asfixiada fiscalmente.
Aparte de lo discutible que es si la comunidad valenciana está mal financiada, lo que los gobiernos autonómicos no pueden hacer es endeudarse llenando la administración de altos cargos de partidos gobernantes, financiando gasto público superfluo. La deuda de la comunidad valenciana es de 60.000 millones en el tercer trimestre del 2024. Si la comunidad valenciana tuviese una deuda pequeña, ahora podría invertir para recuperar los efectos de la riada. Con miles de viviendas arruinadas, negocios e infraestructuras destruidas, la recuperación necesita muchas ayudas directas de capital, no créditos. Ningún general arreglará la situación sin capital. Se derrocha mucho gasto público superfluo, cargos y asesores políticos, exceso de gasto en universidades públicas, pasando por subvenciones a sindicatos y organizaciones . En España los gestores públicos no eliminan lo que sobra, ni la digitalización, ni la inteligencia artificial elimina puestos administrativos evitables con una gestión despolitizada y anti-burocrática. Es inexplicable que las universidades públicas estén repletas de 1,25 millones de estudiantes subvencionadas al 80% y más de 400.000 titulados emigran cada año. En lugar de amortizar jubilaciones de personal, los rectorados inventan decenas de titulaciones dobles para justificar personal amortizable. Isabel Ayuso ha acertado una vez más, congelando prácticamente el presupuesto de las universidades públicas madrileñas. El presidente de Galicia, el Sr. Rueda ofreció primera matricula gratuita en la universidad pública. El PP es un partido socialdemócrata sin identidad ideológica.
La destrucción del tejido industrial manufacturero, primario y automovilístico , por unas élites enloquecidas,han convertido a la UE en una zona económica de servicios, rebosante de burocracia, políticos y funcionarios. Sin energía a precios asequibles, sin defensa, sin control migratorio, la UE va a destruir el estado de bienestar que teníamos en una zona donde el bienestar solo va a ser accesible a las élites gobernantes y funcionariales. Si la desconexión de las élites de la UE es natural o artificial, hablaremos otro día.